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Ente contralor estableció que 374 personas acudieron a este recinto asistencial, lesionadas en el marco de las manifestaciones por el estallido social.
La Contraloría General de la República realizó una auditoría al Programa Integral de Reparación Ocular (PIRO) del Hospital del Salvador, con el objetivo de cómo se manejaron los recursos otorgados por el Estado en el periodo que comprende el 18 de octubre de 2019 y el 31 de marzo de 2021. Entre los principales hallazgos, se encuentra que se realizó un deficiente seguimiento de los dineros entregados, a tal punto que durante el año 2020 se detectaron excedentes por sobre los $ 140 millones.
En su informe, el ente contralor establece que “se comprobó que el Hospital del Salvador no ha implementado medidas que permitan determinar cuáles son los fondos que son destinados al programa PIRO. Lo anterior, debido a que las remesas de fondos mensuales remitidas a dicho establecimiento por el Servicio de Salud Metropolitano Oriente están conformadas por recursos provenientes del Fondo Nacional de Salud, sin embargo, estos se encuentran destinados, a finalidades generales, tales como cubrir anticipos de remuneraciones, pagos a proveedores, entre otros, sin que se distinga entre los fondos orientados a dichos objetivos y aquellos cuya finalidad es el desarrollo del programa en revisión, circunstancia que impide cuantificar con exactitud las cantidades destinadas a su ejecución”.
Contraloría, asimismo, determinó que “se pudo advertir que mediante el decreto N° 1.934, de 15 de noviembre de 2020, del Ministerio de Hacienda, se asignó al Servicio de Salud Metropolitano Oriente la suma de $718.269.000, para que dichos recursos fueran destinados al PIRO en dicha anualidad, sin embargo, los gastos efectuados con . cargo a dicho programa, entre los años 2019 y 2020, habían ascendido a $576.839.768, lo que implica la existencia de un saldo de $141.429.232, al 31 de -diciembre de 2020, respecto del cual no se obtuvo información sobre su utilización”.
Ante esta situación, “el Hospital del Salvador deberá, en el plazo de 60 días hábiles contado desde la recepción del presente informe, comunicar la implementación de un registro que permita determinar los fondos que pertenecen al citado programa y, con ello, obtener su trazabilidad desde su origen, además de informar sobre el uso de los recursos excedentes en el año 2020, por la suma de $141.429.232”.
Otro hito a considerar se encuentra en los inmuebles que se estarían utilizando para implementar este programa. De acuerdo al organismo contralor, “se advirtió que 4 bienes utilizados para el programa aún no cuentan con sus respectivas etiquetas de inventario y la ausencia de señaléticas en las dependencias del programa PIRO, por lo que ese establecimiento de salud deberá, en el plazo de 60 días hábiles contado desde la recepción del presente informe, acreditar el etiquetado de los bienes que son utilizados para el aludido programa”.
Finalmente, Contraloría señala que “conforme al registro de 374 personas que concurrieron al HDS con afecciones de trauma ocular severo, con ocasión de las manifestaciones sociales ocurridas a partir del 18 de octubre 2019, se verificó que, de las 93 atenciones médicas que conforman la muestra examinada, en 8 casos el historial clínico de los pacientes no contiene antecedentes que acrediten las atenciones prestadas en virtud del programa PIRO, disponiendo solo de un registro en el sistema informático denominado ANITA, utilizado en la Unidad de Trauma Ocular, UTO, del cual se obtiene el comprobante de atención del paciente donde se consigna un breve texto sobre cada caso”.
I. FINAL N° 740 DE 2021, SOBRE AUDITORÍA AL PROGRAMA INTEGRAL DE REPARACIÓN OCULAR DESARROLLADO POR EL HOSPITAL DEL SALVADOR, EN EL PERÍODO COMPRENDIDO ENTRE EL 18 DE OCTUB
