Créditos Imagen : Carabineros de Chile
Documento da cuenta que podría haber conocido antecedentes sobre incumplimiento de protocolos.
Andrés López Vergara, En Estrado.
“A partir de las constantes coordinaciones ordenadas por el general director de Carabineros con el Instituto Nacional de Derechos Humanos se han conocido hechos de gravedad ocurridos a partir de procedimientos policiales en el contexto del Estado de Emergencia Constitucional decretado por el supremo gobierno, que ha juicios de la máxima autoridad institucional, requieren ser investigados y aclarados en profundidad y con la mayor celeridad posible, atendida de las circunstancia que las conductas que se atribuyen al personal de la institución se apartan los protocolos de actuación vigentes y de las instrucciones impartidas”.
Así comienza el documento NCU 104063926 enviado por la Secretaría General de Carabineros a los fiscales administrativos de la institución por orden del general director de Carabineros, Mario Rozas. “En este caso, los hechos dicen relación con el relato obtenido por observadores del INDH”, indican en la parte en que se da cuenta de lo ocurrido en el incidente, uno de los casos emblemáticos del estallido social, en los días posteriores al 18 de octubre. En Estrado se reserva el nombre de la víctima para no entorpecer diligencias investigativas. Este caso hay querella del Consejo de Defensa del Estado (CDE) y está en el Ministerio Público.
El documento, enviado el 24 de octubre de 2019, puede llevar a destapar una caja de pandora en cuanto al conocimiento del Alto Mando de la institución sobre el desarrollo de los sumarios y los antecedentes que iban apareciendo en los distintos casos de relevancia pública por abuso de la fuerza, por ejemplo, las lesiones oculares, heridos de gravedad y fallecimientos en que se vieron funcionarios de carabineros involucrados. La razón: en el oficio enviado por orden del general director se pide que se le informe de los avances de este sumario con la intención de determinar los cursos de acción.
“El general director de carabineros ha dispuesto que la jefatura de la zona metropolitana ordene a la fiscalía administrativa la instrucción de un sumario administrativo, con el objeto de que se investiguen los hechos descritos, la participación del personal que estaba de servicio en la unidad y se conozca la verdad de lo sucedido aplicando las medidas administrativas y disciplinarias, en caso de ser efectiva la denuncia mencionada”, señala la orden.
“De los avances del proceso investigativo, se solicita tener a US. tener a bien, mantener informado al general director, de tal forma, de disponerse los cursos de acción que el caso amerite. Lo anterior para conocimiento y cumplimiento. Por orden del general director”, indica la orden del 24 de octubre.
La orden encargó a Mauricio Rodríguez, general jefe de la zona metropolitana, que abriera el sumario. El miembro del Alto Mando es parte de los siete generales a los que la Contraloría General de la República, según reveló Radio Bío Bío, levantó cargos por su eventual responsabilidad administrativa por no garantizar el cumplimiento de los protocolos del uso de la fuerza contenido en manuales internos.
Con surgen varias interrogantes: ¿Cuánto sabía el general Rozas de las investigaciones administrativas de los procesos por las lesiones a Gustavo Gatica y Fabiola Campillai? ¿Este oficio fue enviado sólo para este caso o se repitió en otros? Este documento da cuenta que Rozas podría haber conocido desde los primeros días tras el estallido que los protocolos no se estaban cumpliendo.
Esta instrucción difiere con lo señalado por Rozas sobre su conocimiento de otras investigaciones administrativas abiertas por hechos de violencia que involucran a carabineros tras el estallido social. “No sé el detalle de quién lo tiene a cargo (sumario), pero lo puedo hacer llegar. Me basta con saber que exista sumario, pero por el volumen de información, aunque me encantaría, no conozco otros detalles. No sé dónde está radicado el sumario, pero le puedo enviar la información”, fue lo que declaró en el caso de Gustavo Gatica de acuerdo con un artículo publicado por La Tercera Domingo.