Vania Boutaud Mejías, del 6° Juzgado de Garantía de Santiago, recalcó que ante la emergencia sanitaria que se vive en el país y las medidas adoptadas por el Poder Judicial para evitar la propagación del Covid-19, es imprescindible actuar en coordinación con el Ministerio Público, Defensoría y todos los intervinientes, e instó a todas las instituciones “a tener un ambiente colaborativo”. “Hoy lo que se requiere es que este Sistema Procesal Penal salga adelante, no podemos hundirlo, y si eso implica tener que quedarse en la casa y usar la tecnología para realizar las audiencias, existe toda la voluntad del mundo por parte los magistrados”, dijo categórica.
Drástico ha sido el cambio que ha debido enfrentar por estos días el Poder Judicial en el marco de la emergencia sanitaria por la propagación del Covid-19 en el país, específicamente, respecto a su funcionamiento.
Ello, porque tras la implementación masiva del teletrabajo en diversas instituciones, los tribunales del país han debido comenzar a funcionar de manera remota en la medida de lo posible.
Tal ha sido el caso de la Corte Suprema, Cortes de Apelaciones y el Tribunal Constitucional, que ya están siguiendo la nueva modalidad.
Y si bien la intención del teletrabajo era un tema que ya estaba sobre la mesa de quienes dirigen el Poder Judicial, la emergencia sanitaria obligó a acelerar los procesos para su implementación.
“La situación que vivimos en el país es muy lamentable, pero claramente es una oportunidad para modernizarnos. Ha quedado claro que los tribunales no son los edificios, somos los jueces”, explica al respecto la abogada Vania Boutaud Mejías, magistrada del 6° Juzgado de Garantía de Santiago.
“Existe tecnología que está a disposición de todos: jueces, funcionarios, ministros de la Corte de Apelaciones y la Suprema, y eso ha permitido realizar audiencias de control de detención a través de una videocámara que está en tu teléfono, por ejemplo”, agrega en entrevista con En Estrado.
“Esta es la realidad que nos va a tocar vivir, estamos empezando, y todos los tribunales del país tenemos que ir acomodándonos, ir adaptándonos a la misma contingencia que se va dando día a día”, enfatiza.
Coordinación y colaboración
En la misma línea, Boutaud asegura que para tener buenos resultados “es necesario estar coordinados y, afortunadamente, hoy hay un ambiente colaborativo de trabajo en todas las instituciones”. “Podemos no estar de acuerdo en muchas cosas, pero en estos días, lo que se requiere, es que este Sistema Procesal Penal salga adelante, no podemos hundirlo, al contrario, tenemos que sacar esto adelante y si eso implica tener que quedarse en la casa y usar la tecnología para realizar las audiencias, existe toda la voluntad del mundo por parte de los magistrados”, destaca.
Respecto a hechos concretos, la abogada explica que, en el caso de una persona detenida, “evidentemente va a requerir la constatación de lesiones y tener que ser trasladada a un centro asistencial, va a implicar riesgo de contagio”. “Hay que evitar el traslado de estas personas al Centro de Justicia y la zona de tránsito, los defensores también van a tener que adoptar cuidados respecto a cómo te vas a entrevistar con esa persona porque, el tanto el imputado como el defensor, tienen todo el derecho a poder conferenciar de manera privada. Tal vez nosotros vamos a tener que coordinarnos en línea, esperar que el defensor se entreviste con el imputado y luego, abrir nosotros las cámaras y el audio para que nos podamos conectar todos y hacer esa audiencia de control de detención”, detalla.
Sin embargo, a juicio de la magistrada, todo lo anterior también permite conocer de inmediato el estado del imputado, en qué circunstancias fue detenido, si le fueron leídos sus derechos o si se constataron lesiones. “Es una oportunidad para que cualquier reclamo que quiera hacer el imputado desde la unidad policial, pueda hacerlo de manera inmediata e incluso, nos permite preguntar al mismo funcionario si es que es verdad lo que está diciendo el detenido. Creo que la tecnología nos da la posibilidad de actuar rápido y, en el mismo escenario, que la persona sea trasladada al Centro de Justicia, que es lo que queremos evitar”, dice.
“Ahora, en este ánimo colaborativo, entiendo que la fiscalía, claramente, deberá priorizar quién va a pasar detenido y quién no. No puede ser que por un hurto de una pequeña cantidad de lo que se haya sustraído, la persona tenga que pasar a una audiencia de control de detención. La idea es que sean delitos graves. Por eso, apuntamos a que el sujeto quede en la unidad policial y que se pueda a través de la videollamada y del sistema de soporte que podamos tener, conectarnos todos y realizar la audiencia”, asegura.
Y reitera: “Tenemos toda la tecnología a disposición, la corporación administrativa del Poder Judicial –además- está llana y abierta a prestar todo el apoyo que se requiera. Por ejemplo, el viernes pasado, la visita semanal de cárcel también se realizó por videoconferencia y aunque –evidentemente- fue un poco más lento, Gendarmería tuvo toda la disposición para poner las cámaras para que los jueces pudieran entrevistarse con la gente que está privada de libertad”.
Suspensiones de audiencias
Respecto a las medidas relacionadas con suspensiones de audiencia, actuaciones judiciales y sus respectivos plazos, hasta el cese del estado de excepción constitucional de catástrofe, por calamidad pública en el territorio de Chile, la abogada Vania Boutaud Mejías recalca la necesidad de regulación de las mismas, no solamente en materia penal, sino en todas las causas.
“Hay audiencias que tienen que realizarse igual, nosotros tenemos causas que son impostergables y la Corte Suprema siempre habló de causas impostergables. En nuestro caso, efectivamente son materias que son impostergables, la libertad de una persona no puede esperar, pero un abreviado sí podría aplazarse. Cada tribunal, eso sí, va a tener que ponderar si ese abreviado tiene algún imputado preso, porque si se trata de una causa con una persona que no está privada de libertad, entonces no hay apuro, considerando que estamos hablando de una situación excepcional sanitaria en estado de catástrofe”, detalla, enfatizando que “nosotros como tribunal reagendamos varias audiencias que no tenían mayor complicación o causas con imputados en libertad, salidas alternativas o similares”.
“Esas audiencias no son urgentes, hoy estamos pensando en la salud de todos los intervinientes: fiscal, defensor, imputado, víctima y querellantes”, dice, agregando que “las salas de audiencia, además, no están preparadas, no tenemos la distancia mínima para poder realizarlas”. “Por lo mismo, toda la coordinación que estamos teniendo por estos días, está pensada para personas privadas de libertad, hoy estamos pensando en la urgencia”, aclaró.
Y dice categórica: “La justicia puede funcionar en cualquier parte, basta con que tengamos una coordinación previa entre fiscalía y defensa, poder escuchar al imputado y, muchas veces, a la víctima”.
“La idea es que todos estemos en coordinación y con turnos éticos de trabajo, necesitamos estar preparados para que cuando venga el periodo más crítico de la contingencia y así, poder tener una solución rápida. Estamos recién empezando y creo que hemos funcionado bien para todo lo que nos ha tocado”, insiste, puntualizando que “ahora es el momento de modernizarnos, este ha sido un golpe a la realidad y tener que trabajar así, creo que es la única manera para que el Poder Judicial siga funcionando”.