Verónica Encina Vera destacó que buscará la autonomía de la institución, como herramienta para equilibrar el sistema de justicia en relación con el Ministerio Público y el Poder Judicial.
“La labor de la defensoría es muy importante porque lo que busca es brindar defensa a las personas que no tienen abogado y esa defensa tiene que ser conforme a la ley y al Estado de Derecho y con igualdad”. Así lo aseguró la Defensora Nacional Verónica Encina Vera, en entrevista con Radio Cappíssima de Arica, en el marco de su visita a la región para participar en la Cuenta Pública Regional.
“Obviamente siempre haciendo valer la presunción de inocencia que ampara a todos los ciudadanos, porque para que una persona sea condenada, las acusaciones tienen que probarse”, agregó la máxima autoridad de la Defensoría Penal Pública.
En la misma línea, la abogada agregó que “la Defensoría ha tenido una importante presencia en el área de la defensa de mujeres privadas de libertad y de defensa indígena”, mencionando que “ese es un mundo de mucha segregación y discriminación” que la Defensoría ha enfrentado con facilitadores interculturales “respetando su lenguaje, su idioma, su cultura y haciendo valer eso ante los tribunales”.
Autonomía institucional
Sobre el principal eje de su gestión, la Defensora Nacional destacó que buscará la autonomía de la institución, como herramienta para equilibrar el sistema de justicia en relación con el Ministerio Público y el Poder Judicial.
“Que la Defensoría Penal Pública no sea autónoma, fue un error de la Reforma Procesal Penal, porque eso es un derecho para las personas, no es un derecho para los abogados, es un derecho para los ciudadanos que tienen la posibilidad que se asegure que su defensa no va a ser intervenida o interferida por nadie más que por su propio interés y que el defensor va a poder hacer todo lo que lo que el ciudadano necesita para ejercer sus derechos”, insistió Encina.
Asimismo, recalcó que la autonomía institucional es necesaria “para lograr un equilibrio porque el Ministerio Público, que es el que acusa, durante estos 25 años se ha visto fortalecido, ha crecido, tiene más fiscales, más asistentes, más recursos, mientras que la Defensoría ha ido disminuyendo y eso -entonces- merma el equilibrio”.
“Además, si uno le agrega que la Defensoría no es autónoma, lo que amenaza es el derecho de las personas a ser defendido integralmente, eso debilita el Estado de Derecho, por eso que es tan importante lograr ese equilibrio”, reiteró, afirmando que “falta que se establezca constitucionalmente, al igual que lo establece la Constitución respecto a la Fiscalía, que la Defensoría sea una entidad autónoma, con autonomía institucional, pero también presupuestaria, para poder administrar y distribuir recursos, obtener mayores financiamientos y así -también- tener más calidad de la defensa y más defensores”, concluyó la Defensora Nacional.